Creo que la experiencia más orgasmica en mi vida (aparte de coger durante infindad de horas, días... semanas... meses), ha sido escuchar Orion de Metallica, del album Master of Puppets. Oh! Que emoción, que orgasmeada. Y no es una orgasmeada y un concierto cualquiera, goar:
Estar hasta enfrente, agarrado de la reja, teniendo a unos cuantos escupitajos de distancia a mi grupo favorito(Porque sabrán, mi segunda experiencia más orgasmica, fue cuando Lars bajó de la bateria, tomo de su bebida y nos escupió, o al menos, a los que estaban a su alcance, que, francamente, fue altamente refrescante, dado el caloron sofocante que hacía por tanta presión y tanta gente amontonada), cuando Lars empieza un "solo" de bateria, el cual me puso la piel de gallina, ya que mi niño interior se emocionó al pensar que podía ser Orion, una rola, por cierto, dejenme les cuento, siempre me mojé con escuchar en vivo y me hacía ilusiones de algún día escucharla. Bueno, como les decía, mi niño interior se emocionó y al mismo tiempo dijo "No, no puede ser" cuando, de la nada, se escucha el bajo eléctrico al vil estilo Burtton: El acabose, no sé si lloré, pero definitivamente grité como loco desesperado o como loco apasionado, ORIOOOON NO MAMES ORIOOOOOOOON ORIOOOOOOOOOOON GOOOOOOAAAAAARRRRRR ORIOOOOOON ORIOOOOOOOOOOOON GOOOOOOAAAAAAAAAAAAAAAAAR ORIOOOOOOOOON THANK YOUUUU I LOVE YOUUU GOOOOAAAARR ORIOOOON GOOOOOOAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAR.
Creo que nadie se emocionó más que yo al escuchar esa rola(dejenme ser), dado que mi cabeza giraba a la velocidad de la luz, mientras mi mini-greña tiraba sudor a 360° ah! y mis gritos.
En ese momento no recordé a mi buen amigo Rulo, el cual tan amablemente me compró el boleto, porque, pues bueno, yo estaba jodido. Además, todos eran mis amigos...
